En 1982, Bruce Kilgore (diseñador) decidió diseñar una zapatilla de baloncesto que destacara por su aspecto. En aquel momento, fue el primero en utilizar la tecnología de aire para las zapatillas de baloncesto. Añadió el conocido patrón circular en la suela exterior que fija firmemente la puntera al terreno de juego para un pivote perfecto. También está la famosa correa en el tobillo para ajustar la zapatilla, que hasta cierto punto polarizó al público en cuanto al aspecto de las zapatillas. Nike no tenía grandes planes con las AF-1, por lo que detuvo su producción al cabo de dos años. Pero el ansia de Air Force 1 por parte de los sneakerheads era demasiado grande como para ignorarla. Antes de que las zapatillas volvieran a la producción en 1986, pudimos ver un boom en las aduanas, con clientes ansiosos por ajustar las AF-1 a su imagen. Nike abrió un nuevo horizonte de zapatillas en la Costa Este sin proponérselo siquiera. Filadelfia, Baltimore, Nueva York y sobre todo el entonces Harlem adoraron las AF-1 y las rebautizaron como "Uptowns". La combinación de colores más famosa hasta hoy es blanco sobre blanco, a pesar de que las zapatillas recibieron innumerables CW y collabs. En definitiva, de la escena musical, por ejemplo, Kanye West, Nas o Rakim.